domingo, 15 de mayo de 2011

Un gran amigo me dijo una vez que yo no sabía cuanto me enviadaban los demás.


Yo extrañada le pregunté el porqué.
Me dijo que nada era tan valioso como sonreir en los peores momentos


Que yo nunca escondía una sonrisa a nadie y a nada


ante todo siempre mantenía una sonrisa en mis labios.


He decidido seguirle sonriendo al mundo...

...porque nunca sabes si te devolverá la sonrisa




La vida no es esperar a que pase la tormenta...




sino aprender a caminar bajo la lluvia

5 comentarios: