La dulzura de los momentos que no se planean
ese "momento decisivo" de Cartier-Bresson
haciendo tuyo cada particular atisbo espontáneo
soy partidaria de llamarlo "memoria", los recuerdos del pasado siempre nos traicionan...
Somos instantes, parpadeos intensos de emociones que se pierden en el tiempo y se diluyen en las retinas...
*espero que os gusten mis modelos peludos
jueves, 15 de diciembre de 2011
viernes, 2 de diciembre de 2011
Into the Wild
*He presentado tres fotos al concurso de la revista Magazine, aqui podeis echarles un vistazo
http://vng_concursmagazine11.gnuinepath.com/foto.php?preview=10338
http://vng_concursmagazine11.gnuinepath.com/foto.php?preview=10334
http://vng_concursmagazine11.gnuinepath.com/foto.php?preview=10331
martes, 22 de noviembre de 2011
yo, esa chica de la sonrisa roja
Columpiándome en la cuerda floja de la cordialidad cuando realmente debería dar un portazo en la cara
En esencia, no hay más desprecio que no hacer aprecio
En esencia, no hay más desprecio que no hacer aprecio
jueves, 17 de noviembre de 2011
*
Tenemos la costumbre de mirar el mundo en blancos o negros
balancearnos en el "sí" o el "no".
Evadir responsabilidades que rozan los posibles matices
sentimos acongojo ante la multitud y diversidad de caminos posibles, de decisiones.
Algunos luchamos por observar el mundo en color, por escapar del orden establecido. Por ver más allá de los hechos del hábito y la costumbre. Por no dejarnos cegar por el "hecho" en sí.
dejando atrás la hipocresía que aguarda el día a día, que se esconde en la cotidianeidad del ser.
sin dejarse mecer por el narcotizante edor del victimismo. Qué necesarios son los malos momentos.
Como agujero por el que se inocula el daño,propicia un cambio, nos mejora.
balancearnos en el "sí" o el "no".
Evadir responsabilidades que rozan los posibles matices
sentimos acongojo ante la multitud y diversidad de caminos posibles, de decisiones.
Algunos luchamos por observar el mundo en color, por escapar del orden establecido. Por ver más allá de los hechos del hábito y la costumbre. Por no dejarnos cegar por el "hecho" en sí.
dejando atrás la hipocresía que aguarda el día a día, que se esconde en la cotidianeidad del ser.
sin dejarse mecer por el narcotizante edor del victimismo. Qué necesarios son los malos momentos.
Como agujero por el que se inocula el daño,propicia un cambio, nos mejora.
viernes, 4 de noviembre de 2011
martes, 25 de octubre de 2011
Suscribirse a:
Entradas (Atom)